Un hombre desnudo se yergue con una postura imponente, sus músculos tensos revelan una fortaleza interior. Con manos firmes y seguras, sostiene dos plantas de sábila boca abajo, como si estuviera realizando un antiguo rito de protección. Las hojas carnosas y verdes contrastan con el color rosa del hombre, mientras que sus raíces desnudas parecen aferrarse al misterio ancestral que rodea este gesto. La atmósfera está cargada de una energía palpable, una sensación de conexión con la tierra y sus secretos más profundos. 

Esta pintura al óleo evoca la tradición caribeña de colocar una planta de sábila boca abajo detrás de la puerta para proteger el hogar de las influencias negativas, invitando al espectador a sumergirse en el poder y la magia de estas creencias arraigadas en el alma del Caribe colombiano.

Oleo sobre lienzo

50*70*4 cm

Bogotá D.C.

2021